miércoles, 7 de febrero de 2018

CHILE - Bachelet-Guillier = Piñerachet al cuadrado

Bachelet-Guillier = Piñerachet al cuadrado


José Steinsleger
En los momentos cruciales de su vida política y en el decurso de su devenir, los pueblos siempre se formulan la pregunta del millón: ¿se puede lograr la justicia social en democracia, sin violencia y derramamiento de sangre?
Tal fue la esperanza del pueblo chileno en noviembre de 1970, cuando la Unidad Popular (UP, coalición liderada por Salvador Allende), ganó los comicios presidenciales con poco menos de 37 por ciento de los votos. Triunfo ajustado, ya que la derecha dura y pura, más la Democracia Cristiana, cosecharon 63 por ciento de los votos (35 y 28 por ciento, respectivamente).
Centenares de politólogos de fama mundial se dieron cita en el país andino, produciendo millares de textos y polémicas que giraban en torno a la transición pacífica al socialismo
Y en 1971, la esperanza se redobló: la UP consiguió 48.6 por ciento de los votos en las elecciones municipales, y en marzo de 1973, 44 por ciento de las bancas parlamentarias.
El triunfo de la UP tuvo lugar en el cénit de la llamada guerra fría. Por ejemplo, un cable desclasificado del Departamento de Estado revela el diálogo sostenido entre Richard Nixon y el secretario de Estado Henry Kissinger, luego que el New York Times publicara una información sobre lachilenización del cobre
Un proceso que había iniciado el presidente Carlos Ibáñez del Campo (1952-58), continuado por el democristiano Eduardo Frei Montalva (1964-70), y completado por Allende en julio de 1971.
Nixon: ¿Viste esto?
Kissinger: Sí, lo vi.
Nixon: Es hora de patear a Chile en el culo (it’s time to kick Chile in the ass).
Entonces, el diario El Mercurio, de la familia Edwards, empezó a recibir ingentes sumas de dinero de la CIA, en el entendido de que este medio tenía un efecto multiplicador, y “…sus editoriales y noticias eran leídos en todo el país a través de varias cadenas de radio” (informe del senador Frank Church, 1975).
Simultáneamente, en noviembre de 1971, Fidel aterrizaba en Santiago. Una visita extraordinaria que, inusitadamente, se extendió por más de tres semanas. A partir de ahí, las derechas pasaron a la ofensiva.
En junio de 1973, las fuerzas armadas enviaron el primer aviso (tancazo), y el 11 septiembre, durante el bombardeo al Palacio de La Moneda, Allende murió con metralleta en mano, defendiendo la Constitución… por la razón, o la fuerza. Así quedó despejada la interrogante planteada más arriba: la violencia seguía siendo partera de la historia.
Ahora bien: ¿de cuál historia? Porque mientras el pueblo chileno resistía heroicamente contra la dictadura (1973-1989), los políticos velaban por la suya en lo que dio en llamarse Concertación(1988), bajo la mirada vigilante del tirano, el modelo de alternancia de los Pactos de la Moncloa (Madrid, 1977), y la Constitución pinochetista de 1980, hasta hoy vigente.
Por la razón, o la fuerza. Lema adoptado por los próceres independentistas de la llamada Patria Vieja (1810-1814), y que remite a Platón, el Estado de Derecho de la antigua república romana (por consejos, o por espada), y que no necesariamente es igual a Estado democrático.
De ahí que, luego de la alternancia entre los gobernantes de laConcertación (Patricio Aylwin, 1990-94; Eduardo Frei Ruiz Tagle 1994-2000; Ricardo Lagos 2000-06), dimos cuenta, en sucesivos artículos, de las fraudulentas ecuaciones institucionales que el diario español El Paíscalificó en un editorial de “…exquisitas formas entre vencedores y vencidos” (sic, 18/12/17):
Pinochet + Concertación = Bachelet (2006); Bachelet – Pinochet = Piñerachet (2010), Piñerachet + Matthei = Bachelet (2014), hasta llegar al engendro de días pasados: Bachelet – Gillier = Piñerachet al cuadrado.
Común denominador: Pinochet. En suma, 44 años de un cuento ideológico que permite entender, plenamente, la crónica abstención de 50 por ciento del electorado, en uno de los países más injustos y desiguales del continente.
En marzo de 2018, la izquierdista Michelle Bachelet entregará nuevamente la banda presidencial al magnate Sebastián Piñera, uno de los tantos dueños de Chile que, a más de ser hermano de José Piñera (acérrimo colaborador de Pinochet), cuenta con un amplio prontuario judicial.
Cabe esperar, por fin, que la ceremonia no esté marcada por el percance que sufrió Bachelet en 2014, luego que se le cayera la piocha de O’Higgins. Por lo cual, el edecán del Senado debió facilitar una de sus insignias para salvar el incómodo momento. La piocha es el distintivo que en el traspaso del mando de un presidente a otro, simboliza la entrega del poder en Chile.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si nos han de robar, 
que sean otros y no los mismos de siempre

Si como votantes, no nos escuchan
como consumidores, lo harán
boicoetemos sus empresas.
Llevamos las de ganar. 

Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
propongo... 
actuar todos unidos como consumidores
contratando TODOS 
o en su defecto una gran mayoría,
  otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
o atenerse a las consecuencias 
de seguir con su estafa.

En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

ARMAK de ODELOT

Canción del Indignado Global

(solo pá Mentes preclaras 

libres de Polvo y Cargas)

Si me han de matar que sea,
 un Trump que de frente va

  no un Obama traicionero, 

que me venga por detrás.


Éstos del bipartidismo, 

a nadie ya se la dan

Tanto monta, monta tanto,

ser sociata o liberal.


Que harto me tienen sus cuentos, 

de crisis y guerras sin más

Cuando no hay bandera que tape, 

la ansia de un criminal.


Daños colaterales son, 

inocentes masacrar

si lo hiciéramos con ellos, 

no habría ni una guerra más.


Por eso pasa que pasa, 

que nadie se alista ya

a no ser que la CIA pague,
 
como al ISIS del MOSAD


A mí, que nunca me busquen, 

ni me llamen pá luchar.

Que yo no mato por nadie. 

Yo mato por no matar.


La paz de los cementerios 

es la paz del capital

Si soy rojo es porque quiero, 

en vida, vivir en paz.


Hoy tan solo mata el hambre, 

del rico por tener más 

Con el cómplice silencio, 

de toítos los demás.


Que preferimos taparnos, 

los ojos pá no pensar

O mirar pá otro lado, 

pensando que el mal se irá.


Creer que lo que a otro pasa, 

no nos tiene que importar.

Cá palo aguante su vela, 

repetimos sin cesar.


Éste es el mantra egoísta 

que rula por la sociedad

como si lo que le pase a otro, 

no te pueda a tí pasar


Más todo, cuán boomerang vuelve, 

al sitio de donde partió

y tal vez ocupes mañana, 

el sitio que otro dejó.


Mil pobres ceban a un rico, 

otros mil le dan jornal,

y otros cuantos dan su vida 

porque todo siga igual. 


Que no me coman la oreja, 

que no me creo ya ná

de sus guerras, sus estafas, 

ni su calentamiento global


Tan solo vuestras mentiras, 

esconden una verdad

que unos pocos están arriba 

y abajo tós los demás.


Da igual que seas ateo, 

cristiano o musulmán.

Solo los elegidos, 

el paraíso verán.


Hay medios alternativos, 

amarillos muchos más.

Unos más rojos que otros. 

Los menos, de radikal.


Más todos tienen su cosa, 

y a todos hay que hojear

Que comparando se tiene 

opinión más general.


Qué de tó aprende uno. 

Nadie tiene la verdad.

Ser más papista que el Papa, 

no es garantía de ná.


Solo creo en lo que veo, 

díjome santo Tomás, 

que el que a ciegas se conduce, 

no para de tropezar.


Y al enemigo, ni agua, 

ni nunca contemporizar

No dudes, tarde o temprano, 

siempre te la jugará.


No hay que seguir a nadie 

y a todos hay que escuchar.

Si tu conciencia te guía, 

de nada te arrepentirás.


Dá gusto ver a los ricos, 

pegarse por serlo más

mientras en eso se hallen, 

quizás nos dejen en paz.


Si te crees o no sus mentiras, 

a ellos les dá igual.

Con tomarlas por veraces, 

les basta para actuar. 


Que no me cuenten más cuentos, 

que tós me los sé yo ya.

Se demoniza a cualquiera

que no se deje robar.



No basta con ser un santo, 

sino ser de"su santoral"

Como la cojan contigo, 

no te valdrá ni el rezar.


Pensamiento único llaman. 

Anteojeras pá no pensar

más que en la zanahoria. 

El palo irá por detrás.


Si no crees en lo dictado, 

anti-sistema serás

Y por mucho bien que hagas, 

te van a demonizar.


Que no me coman la oreja, 

que a mí, no me la dan.

Que me sé todos sus cuentos 

y también, cada final.


Si de cañon, quieren carne, 

pál matadero llevar

que busquen a otro tonto, 

que este tonto no va más



No se ha visto en tóa la historia, 

otra estafa sin igual.

Que la madre tóas las crisis, 

que creó el capital


Y cuando tan ricamente, 

uno estaba en su sofá

Relajado y a cubierto, 

de inclemencias y demás,


te cortan sin previo aviso

el grifo de tu maná. 


Y te dejan sin tus sueños,
 
sin trabajo y sin hogar


y pá colmo y regodeo 

de propios y extraños, van

y te dicen como aviso

que al rojo no hay que escuchar


que son peores que el lobo,

del cuento y mucho más

y que si vas y los votas

toíto te lo robarán.



Si como votantes, no nos escuchan

como consumidores lo harán.

Boicoetemos sus empresas

Llevamos las de ganar. 


Si no queda más remedio

que dejarnos de robar

que sea otro y no el de siempre

tal vez así, aprenderá


No hay pan pá tanto chorizo,

dicen, cuando lo que sobra es pan.

Lo que no hay es un par de huevos
 
pá que no nos choriceen más.


Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

Ellos tienen de tó

los demás, cuasi-de-ná

mas ellos son cuatro mierdas

y nosotros sémos más.


La próxima revolución 

contra las corporaciones será

y si ésta no se gana 

no habrá ninguna ya más.

Quien sepa entender que entienda

lo que digo es pá mascar

despacio y con buena conciencia.

Mi tiempo no dá... pá más


Armak de Odelot


Dicen: 

No será televisada, 

la próxima revolución.

Más como nadie se fía 

de lo que se nos dice hoy en día,

pasamos los días enteros, 

tumbados en el sofá

delante la caja tonta,

 por no perder el momento
del pase de la procesión 
que tós llevamos por dentro